martes, 29 de septiembre de 2009

Periódico A las Cumbres.

Desde esta semana circula la edición del periódico normalista "A las cumbres"

Me refiero en esta nota a la página dedicada a la Sede Rural Cariongo.


Preocupación Infantil

Desde su llegada esta mañana a la escuela H* se mostró preocupado. Luego del saludo me anunció:
-Más tarde baja papá porque lo citó Bienestar Familiar-

Le pregunté cuál era el motivo de la citación del ICBF para su padre, pero el niño no tenía clara esta información. Sin embargo, empezó a decirme que él se sentía bien con el papá, que desde que estaba estudiando en esta escuela las cosas habían empezado a cambiar para él.

Por ejemplo, señaló, mi papá me ha comprado ropa y zapatos y los útiles escolares que me faltaban. Yo le ayudo a él en el trabajo y ésto me gusta, porque estamos juntos y hablamos. A veces bajamos al centro y él me compra cosas. En cambio cuando vivía con mi mamá ella me golpeaba casi todos los días y cuando salía a trabajar en la noche me quedaba solo, con mi hermanita menor, y teníamos que esperarla hasta que volviera.

Y H* siguió hablando, por eso cuando fue el momento del refrigerio, le solicité que le informara a la profesora que orientaría el proyecto de comunicación que iba a estar dialogando con su profesor titular.

Consideré que el acto de escuchar a H* para este niño era muy importante. Continuó luego del refrigerio con el relato hasta llegar al presente donde reafirmó su bienestar al lado del papá. Terminada su historia donde aparecieron golpes, soledad, abandono y tristeza y algunas alegrías, se incorporó al encuentro de comunicación pero su preocupación había disminuido.

No le dije nada, porque no tenía los elementos suficientes para conceptuar sobre su situación, pero lo había escuchado y en esa actitud encontró el apoyo que necesitaba para sentirse importante, capaz de aportar a su desarrollo personal y académico, porque me habló que era consciente de que estaba mejorando su forma de letra, de leer, que estaba dando rendimiento en matemáticas y que se sentía alegre con sus amigos y profesores en la escuela. Que ya no se volaba ni tenía necesidad de escaparse para estar con su padre.

Compromiso: Estaré pendiente de la situación que rodea a H* para contribuir en la medida de las posibilidades a apoyarlo y a orientarlo para que no le sean vulnerados sus derechos.


Otras presencias

Aparte de las maestras en formación que la ENSP envía para que desarrollen la etapa de práctica docente, la Universidad de Pamplona ha delegado a otro grupo de estudiantes del programa Pedagogía Infantil para que se vinculen como practicantes en la sede.

La experiencia busca acercar al campo real de la educación a jóvenes que se forman en la institución de educación superior.

La mayoría de ellos no han cursado su bachillerato en escuelas normales, de tal forma que las carencias en cuanto a formación en el érea pedagógica están a la orden del día.

Sin embargo, se entiende que luego de siete semestres (éste es su nivel de estudio en la actualidad) la Universidad se ha encargado de orientar a los futuros egresados en el área pedagógica. Aunque no con la misma intensidad y dedicación que supone una escuela Normal.

A la altura del año lectivo la presencia de este personal puede representar alguna pérdida del ritmo en el desarrollo de los programas académicos.

Si bien es cierto que la llegada de los practicantes representa eventualmente un nuevo aire para los estudiantes, la dinámica del proceso enseñanza aprendizaje, en ocasiones se enmarca en desórdenes, explicaciones superficiales, poca atención a hábitos, escasa atención a las diferencias individuales, entre otros aspectos, que sumados determinan cambios hacia lo negativo en el desempeño y rendimiento de los estudiantes.

Sobre estas reflexiones he dialogado con los estudiantes universitarios y normalistas, buscando disminuir el impacto generalmente negativo que su presencia representa para el ritmo del año lectivo.



Títeres

Por inciativa de la profesora de los niveles segundo y tercero se programó para el pasado lunes un taller para la construcción de títeres.

Para permitir que todos los niños y niñas de la sede tuvieran la oportunidad de compartir la experiencia, lo hicimos extensivo a todos los niveles.

Previamente se sugirió una lista de materiales para conseguir.

La idea fue construir los muñecos a partir de elementos reciclables.

De tal forma que para este fin objetos como envases plásticos  de gaseosas, jugos, aceites, talcos medicinales y otros, tapas, botones, cajas pequeñas de cartón, hilos, lanas, semillas, piedras resultaron precisos.

Como antesala una pequeña representación en improvisación de los profesores, algunas explicaciones muy sencillas sobre qué es el títere y sus posibilidades de uso, estructura del muñeco y clases más usuales.

Luego: manos a la obra.

Los docentes nos encargamos de orientar a partir de instrucciones sencillas el trabajo que tenía la guía del muñeco que cada uno de nosotros elaborábamos.

Al final: gatos, gatas, marcianos, astronautas, ancianos, niños, indios, árboles, mariposas y un conjunto amplio de seres reales o imaginarios pasaron a convertirse en los nuevos habitantes de las aulas de clase.

En la parte final del taller algunos estudiantes se arriesgaron en el inicio de la manipulación y como producto de esta experiencia varios niños y niñas se apropiaron del teatrino que habían traído las maestras en formación de la ENSP y representaron pequeñas muestras donde cobraron vida los personajes por ellos concebidos, diseñados y puestos en escena.

Muchos de los niños a quienes les reconocemos por asomos de timidez o falta de dinamismo en cuanto a su participación en las clases, fueron los primeros y más decididos a socializar su obra.

Por este ejercicio puedo concluir algo que viene haciendo carrera en el mundo de la pedagogía de tiempo atrás: el teatro, y en este caso específico los títeres, son una excelente herramienta a la hora de asumir procesos de enseñanza y aprendizaje.

sábado, 26 de septiembre de 2009

¿Qué hay detras?

La primera vez me resultó algo a lo que nos fuimos acostumbrando en este país de inequidades y brechas enormes.

Es una situación con la que nos encontramos en cualquier calle de esta geografía maltratada.

Además, frente a las propuestas de erradicación del trabajo para los menores de edad, estos cuadros parecen aumentar en su presencia.

Cada día hay más niños o niñas que ofrecen desde un almanaque a mitad de año, hasta una colección de agujas. Bueno ésto en el mejor de los casos, porque es desgarradora la situación cuando lo que ofrecen es su humanidad, es decir, su vida.

La segunda vez, me llevó a iniciar una reflexión que ahora trato de plasmar en este post.

-¿Compra a tinto a docientos?

Y el dueño de esta más que comercial, conmovedora voz, es un niño que no supera los nueve años.

Lleva un termo dentro de una bolsa y se acerca a sus potenciales compradores con prudencia, y casi que con temor.

En este sitio, un Café Internet, los cibernautas, niños, jóvenes y adultos, escasamente realizan un corto moivimiento para no perder la atención sobre la pantalla, y sin percatarse de quién es el que habla, responden negativamente.  

Y es que el ofrecimiento del tinto a docientos pesos lleva una marca de tristeza aguda, de angustia.

Es cuando me surge la pregunta:

¿Qué hay detrás de esta venta de tinto? ¿Quién está detrás de este niño?

Bien pudiera ser lo más cotidiano: una mamá que ante la urgente necesidad de mantener a unos hijos o una familia, se ve en la obligación asarosa de mandar a la calle a uno de sus críos a vender café; pudiera ser que la madre es un padre sin trabajo y con alguna enfermedad, o un hermano a hermana mayor que le ha tocado echarse  a cuestas una responsabilidad con la que no contaba.

Pero también se puede contemplar que detrás de esta humanidad, agobiada y doliente (como reza en alguna de las novenas de los católicos) haya alguien que desde una más cómoda y ventajosa posición esté utilizando a este menor para explotarlo.

Es este país, mi país, donde muchas historias apenas nos llegan en forma de titular o de rostro apenas esbozado para no enterarnos por completo de las tragedias que viven seres humanos, desprotegidos y vulnerables en extremo.

Procuraré averiguar algo sobre esto. Es el aula sin paredes ni circunscripción geográfica. Son los estudiantes que tenemos no sólo por matrícula sino por compromiso y convicción humana.

viernes, 25 de septiembre de 2009

AGROVIDA



AgroVida es un programa de una multinacional productora de insumos agropecuarios que enseña a las personas el uso seguro y eficaz de los productos fitosanitarios.



De una manera clara y didáctica promueve el cuidado de la salud de las personas, el medio ambiente, al tiempo que busca crear en los trabajadores del campo colombiano y de sus familias un entorno sostenible en el tiempo.


Pictogramas para el buen manejo de los productos fitosanitarios, presentaciones y vídeos para orientar acerca del manejo seguro de plaguicidas formaron parte de la charla orientada por un funcionario de la empresa.


El lema de la campaña “Armonía con el medio ambiente y el usuario” contiene la intención de contribuir a reparar el eventual daño derivado de los productos sobre y su impacto negativo sobre la naturaleza.


Niños y niñas participaron activamente, realizando pregunta, presentando inquietudes, compartiendo casos particulares presentados en sus familias, leyendo los contenidos mostrados en las presentaciones.


Al final respondieron algunas preguntas dirigidas por el responsable de la charla y así participaron en la rifa de algunos útiles escolares.



El compromiso: socializar la información recibida con sus familiares y así iniciarse en una actitud de prevención frente a los potenciales riesgos cuando de manejar este tipo de productos se trata.

Me da pena

-Me da pena- ésa fue la expresión de J* cuando le correspondió el turno para leer apartes de la presentación que apoyaba la charla sobre “Manejo seguro de plaguicidas”



Habían leído o intentado leer los niños y niñas desde pre escolar hasta quinto. También lo había hecho A* (la niña que por estos días ha llegado a la escuela para integrarse al Quinto Nivel.


Algunos se equivocaron, otros lo hicieron con bajo volumen, otros más sin mayor interpretación o vocalización, pero leyeron.


J* había participado activa y entusiastamente, formuló preguntas, comentó casos particulares de su familia, realizó comentarios, pero… cuando le llegó el turno de leer, no lo hizo.


Después quedó en una actitud disminuida, recostado al estante de los libros, bajó la cabeza y mostró perder el interés en el tema que se trataba.


Pena es una americanismo que significa timidez, vergüenza. Y es la turbación de ánimo en la que caen algunas personas cuando experimentan temor a hacer el ridículo.


Me inclinaría a considerar que si en la escuela y mejor, desde la familia, no posibilitamos que los niños y niñas adquieran la habilidad para apropiarse de espacios y momentos en medio de conocidos o desconocidos, les estamos restando en su futuro desempeño la seguridad necesaria para enfrentar un contexto.


La habilidad a que me refiero se empieza a despertar y a adquirir con una efectiva comunicación desde la cuna. Hay que permitirle al niño que se exprese, al principio con balbuceos, gutureos, llanto, risas y toda esa gama de significantes con los que va creciendo el ser humano hasta llegar al lenguaje articulado y no articulado.


Cuando ya ha hecho suyo el mágico momento de la comunicación articulada se requiere de volvernos más oídos que bocas, invitarlo a manifestarse, a expresarse, a contarnos lo que siente, a decirnos lo que piensa, a compartirnos lo que sueña.


Y ante equivocaciones, apenas naturales, y necesarias por demás, hacerlo responsable de las mismas, pero orientarlo sobre la manera de corregirlas y superarlas.


Pienso que en este proceso, en algún momento de su vida familiar o escolar J* se enfrentó a una equivocación y no contó con el respaldo para superarla y lo que aflora en los momentos como el reseñado en esta nota, es la incomodidad experimentada en esa situación.


Ahora, tal vez años después, le corresponde a la escuela, en este caso al maestro, ofrecer a J* estrategias y posibilidades cercanas para que entienda que ese incidente sólo formó parte de su desarrollo natural y que está en el pasado y por lo tanto no existe, menos cuando es un factor desencadenante de momentos negativos en su vida académico que bien pudieran ser en el ámbito social.


Sobre eso hemos dialogado en otras oportunidades, pero hoy de manera aplicada le he propuesta una conversación franca al niño procurando hacerle entender que está en sus grandes capacidades la decisión de superar esta actitud.


Compromiso: Asumir las recomendaciones que he podido concebir a partir de este ejercicio de observación motivado en uno de mis estudiantes.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Ambiente enrarecido

Para que se pueda cumplir con la responsabilidad que implica el acto educativo, se requiere que el ambiente en medio del cual se desarrolla ésta delicada misión sea el más adecuado y cumpla con las características de óptimas condiciones, excelentes ayudas y materiales, y que todo ésto esté enmarcado en un clima de paz laboral.

En este país nos estamos acostumbrando a lo difícil, a lo que se sale de lo normal, a vivir con la zozobra como parámetro de cotidianidad, a correr sobresaltados por un atentado, o transitar por senderos determinados para evitar el peligro, a esperar que los servicios médicos lleguen como un favor y no como la prestación de una acción contratada y pagada de manera sobrevalorada, a convivir con la angustia del recortre de las garantías laborales y así en un sucesivamente que se hace eterno.

Pregunto:

¿Es posible que un maestro sea capaz de dejar esta pesada carga antes de entrar al salón de clase para orientar los procesos de enseñanza y aprendizaje?

Sólo hay que colocarse en el puesto de cada uno de los profesores colombianos para intentar una respuesta que de hecho apunta a una negativa rotunda.

Los maestros no sólo reclamamos sino necesitamos un ambiente laboral que esté en concordancia con nuestra dignidad de seres humanos y que respete desde su valoración el papel fundamental que cumplimos en la sociedad.

Desde años atrás el ambiente en el cual trabajamos los profesores colombianos está enrarecido y cada día crece la zozobra.

Hoy adelantamos una marcha para hacer visible la dura y difícil situación por la que atraviesa el sector de la Educación Pública en Colombia.

¡Persistiremos en la justa reclamación de nuestros derechos!

martes, 22 de septiembre de 2009

Ganas de cambio

En las formaciones del año anterior J* mostraba un comportamiento desordenado. No atendía a lo que sucedía alrededor de este encuentro de todos los estudiantes y profesores. Interrumpía a aquellos niños o niñas que trataban de escuchar las observaciones o de seguir las instrucciones que se transmitían.



Parece que se complacía estando fuera de la formación, que disfrutaba actuar en contravía. Es posible que necesitara llamar la atención, ser observado, recibir una observación, que alguien le dirigiera la palabra, así fuera para recriminar su comportamiento.

Con la llegada al Cuarto Nivel de J*una de mis preocupaciones fue iniciar un proceso de acercamiento para procurar indagar qué había detrás de ese tipo de comportamientos del niño.


Con el paso de los días fui detectando y observando otros comportamientos que estaban en concordancia con el reseñado.


Ante cualquier observación o comentario que no fuera de su agrado o que estuviera en línea con sus intereses y caprichos, J* reaccionaba aislándose, retirándose de la actividad que se adelantaba. No daba explicación, permanecía en silencio, cabizbajo.


Esta fue la constante durante el primer periodo académico y parte del segundo.


Diálogo, conversación frecuente donde le hacía ver sus capacidades y valores. Involucrarlo en actividades grupales como danzas y micro fútbol, hablar con los padres para que autorizaran su participación en salidas e integraciones. Éstas fueron algunas de las acciones que tracé buscando que J* se decidiera a superar esa forma de actuar que no correspondía ni a su edad ni a su nivel académico.


Para comienzos del segundo semestre se podía observar un cambio. No del todo, pero sí destacable.


J* ya no se retiraba de las actividades. Tampoco se aislaba. Enfrentaba las dificultades, a veces con llanto y silencio, pero terminaba reconociendo el error o la falta. Entonces, tomaba impulso, si así puede llamarse a la decisión de retomar el trabajo, volver al grupo, retornar a la actividad y estar con toda la energía para aportar y aportarse.


Esas ganas de cambio le han ayudado mucho a J*. Sin embargo, es una situación en proceso. Espero que durante el cuarto y último periodo de clase, se fortalezca en su propósito. Así habrá un ganador: J*.


De hecho, debo reseñar que paralelo a su mejoramiento comportamental, su rendimiento y desempeño académico han mejorado significativamente.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Movilidad

En este país se ha vuelto habitual el desplazamiento. Las cifras de este duro fenómeno se incrementan a diario y las consecuencias no se han tenido en cuenta por parte del gobierno para establecer mecanismnos de control, disminución y eliminación de esta dura realidad.

A la vereda durante los últimos cuatro años han llegado familias provenientes de otras veredas, de otros municipios y en ocasiones de otras regiones.

La llegada a la escuela de angustiadas madres (porque siempre son ellas las que se presentan) para solicitar un cupo para sus hijos, nos alertan de la llegada de una familia a la vereda.

Generalmente estas personas no viven por más de tres meses aquí. Las mismas circunstancias de falta de trabajo, pobreza y total inestabilidad las impulsan a seguir esa suerte de trágico peregrinaje.

Esta nota surge porque la semana anterior llegó la señora Marleny para que en la escuela se le recibieran a dos de sus hijos.

Una de ellas, A*, llegó para el Quinto Nivel. El último mes estudió en el centro Educativo Fontibón y durante los primeros meses del año lo había hecho en la Sede Central de la Básica Primaria de la Escuela Normal Superior.

Aparte de influir en la vida social, cultural y familiar (afectiva) de estos niños, esta movilidad forzada incide en el desempeño académico de niños y niñas que no tienen culpa alguna de una tragedia con la que se familiarizan para poder subsistir en este medio cada día más inhumano.

Registraré aquí las conclusiones de la valoración (diagnóstico) y lo que asimile A* durante el último periodo académico si es que antes no ha emigrado al lado de sus padres que seguramente buscarán ese mejor estado de cosas a que tienen derecho.



Bienvenido el juego


Habiendo quedado casi que subutilizado uno de los juegos de la jornada de integación de amor y amistad, la tradicional coca;  éstas elaboradas a partir de un vaso desechable, un fragmento de lana y una pelota pequeña, se utilizó algún tiempo después del recreo para invitar a los niños y a las niñas a jugar.

Si a alguien se le invita a un tiempo adicional luego de concluir su jornada habitual, aparte que se sorprenderá, muy seguramente se negará, o en el mejor de los casos justificará de alguna manera la imposibilidad de realizar lo pedido.

Pero con los niños, no sucede tal cosa. Terminan un recreo, agitados, cansados y se les invita a participar en un juego y sin pensarlo dos veces, dicen que sí.

En los niños la disposición al juego es natural, innata y difícil de ahuyentar.

Visto desde la óptica de la actividad académica, se pudiera decir entonces, que si ésta se desarrolla en medio de actividades lúdicas, siempre se podría garantizar un interés de parte de los infantes, además, que se pudiera garantizar una participación más efectiva y los resultados serían mejores.

Para los niños el juego siempre es bienvenido.

Reflexión: a través del juego se puede enseñar y el proceso de aprendizaje de los niños y las niñas será más efectivo.


sábado, 19 de septiembre de 2009

El inexorable tiempo.


Se aproxima el receso estudiantil de octubre. Se asemeja esta cercanía con el pálpito que se esconde en los estudiantes cuando el rumor del recreo merodea el aula de clase.

Octubre está en la mira. Y luego de esa semana de asueto para los niños y niñas, quedaremos enfrentados a la recta final del camino trazado para este 2009.

Parece que es imperceptible el paso de los días.

Una de las formas para verificarlo pudiera ser repasar las hojas de los cuadernos que se han ido llenando de letras, números, dibujos, observaciones.. y algo de mugre cotidiana.

Otra, intentar vaciar los sonidos, los gritos, las palabras, las risas, los llantos, los susurros sobre el patio de recreo para obtener una montaña de Babel.

En fin, lo que quiero consignar es que los días que restan para la clausura del año lectivo son pocos. Estudiantes y maestro, nos tenemos que empeñar en aprovechar al máximo este tiempo para que la cosecha que unos y otro, así como los padres de familia, esparamos.

viernes, 18 de septiembre de 2009

Amistad



Organizada por las Maestras en Formación de la Escuerla Normal Nacional de Pamplona, con el apoyo de los profesores titulares, se realizó este viernes una jornada para celebrar el día de Amor y Amistad.

Los padres de familia o acudientes aportaron un mínimo recurso y el grupo de docentes gestionó para conseguir lo necesario para garantizarle a los niños y a las niñas de la sede una mañana diferente.

Dinámicas para comenzar el día; elaboración de una tarjeta por parte de todos y cada uno de los estudiantes para compartirla con un compañero o compañero que se convertiría en el amigo o la amiga.

Un refrigerio para dividir la mañana.

Luego, estaciones para practicar diferentes juegos, algunos de la tradición popular: jazz, mini fútbol con banquitas, volibol pié, pirinola, coca, tángara.

Y para concluir esta integración el docente que adelanta su proyecto de Trabajo Social en el área de Educación Física, Recreación y Deportes, propuso "el tesoro escondido", que como es fácil adivinar, se trató de encontrar un regalo que previamente había sido colocado en un lugar estratégico.

Después el almuezo y un abrazo para reafirmar nuestros sentimientos de amistad.


Pruebas Saber.

Faltando un mes para que los estudiantes de los grados Quinto y Noveno presenten las Pruebas Saber, la Secretaría de Educación Departamental citó a una reunión informativa.

El objetivo central entregar una cartilla referente a esta evaluación.

"SABER es una evaluación nacional, de carácter censal que se realiza cada tres años a estudiantes de quinto y noveno grado de establecimientos educativos oficiales y privados, para valorar sus competencias en lenguaje, matemáticas y ciencias. Su objetivo es contribuir al mejoramiento de la calidad de la educación colombiana al aportar información confiable y oportuna sobre las fortalezas y debilidades de los estudiantes y los factores que explican sus resultados, lo que permite orientar la formulación de planes de mejoramiento institucional. En octubre del presente año se realizará la aplicación de SABER a niños y jóvenes de calendario A del país".

Lo  cierto es que el funcionario del orden departamental orientó una charla sobre la algunas experiencias que desde lo personal han ido marcando en él directrices para su actuación oficial.

Claro sí dejó el propósito, pues en varias ocasiones dijo que no quería hacer entrega del material sin antes haber compartido con los profesores asistentes algunas reflexiones a partir de su ejercicio docente y administrativo.

Al final se nos entregó el material que publicó el ICFES y el cual según el funcionario fue impreso por la Gobernación del Departamento.

Esto debe ser un proceso, no un compromiso para recoger resultados y ojalá excelentes, para justificar acciones de gobierno, ausentes o inexistentes.

Esta cartilla, porque es para el docente, seguramente aportará para los posteriores años y si hay recursos para reproducirla para nuestros estudiantes, de pronto ayude a clarificar este procedimiento para el año 2012.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Exalumnos.

Me encontré esta tarde con la mamá de D*, una niña que egresó el año anterior de nuestra escuela.
Me refirió que la niña, ya preadolescente, quien cursa su sexto grado en uno de los colegios exigentes de la ciudad, ha tenido un buen desempeño. Aunque en el caso de las matemáticas, tiene algunas dificultades.
Los logaritmos, manifestó.
Es el comienzo de esa etapa diferente a la escuela. La Educación Básica Secundaria, señalé.
Pero si un estudiante ha aprovechado la escuela y ha hecho una buena apropiación de conocimiento, seguramente durante el bachillerato los problemas serán menores.
Las dificultades de esta segunda etapa, nacen, de una primera, atravesada a medias. No es culpa de la escuela, más bien podríamos señalar que es la actitud y responsabilidad con que se asuman los primeros años, tanto por parte del estudiante como por parte de los padres o los acudientes.

martes, 15 de septiembre de 2009

Welcome

Dos estudiantes de la Universidad de Pamplona empezaron desde hoy el desarrollo de su proyecto de Trabajo Social en nuestra sede.

Es la continuidad de un apoyo interesante y necesario que nos ha brindado la institución de Educación Superior desde hace dos años.

Los niños y niñas tenían bastante expectativa por esta actividad.

La semana anterior que se presentaron en la escuela para comunicar su intención de vincularse con la comunidad, el grupo las recibió con una canción en Inglés que aprendieron el semestre pasado.

Ellas agradecieron y quedaron bien impresionadas con la actitud descomplicada de los infantes.

Hoy al concluir el encuentro dialogué con las dos estudiantes de Lenguas Extranjeras y en conclusión hubo un buen trabajo, bastante motivación en el grupo y pudieron desarrollar lo que habían planeado.

Buen comienzo y ... Welcome to the English.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Privilegio

Me dijo una madre de familia que el deseo de ella y el de su esposo es que la niña que actualmente cursa Cuarto Nivel en la Escuela, estudie el año entrante en un colegio urbano de Pamplona.
Entre otras razones, que  no tiene muy claras, expresa que en últimas y resumiendo los motivos podría decir que es por "tener el privilegio" de que su hija estudie en una institución diferente a la "escuelita de campo" donde hasta el momento y desde el pre escolar se ha formado.
Se escucha extraño que una familia campesina considere como privilegio que uno de sus hijos estudie en un centro urbano.
Es en la vereda donde se nace, se crece, se desarrolla la actividad productiva de la cual derivan los recursos para garantizar su subsistencia. Y en el corazón de la comunidad veredal está la "escuelita".
Entonces, ¿cuál puede ser la ventaja exclusiva  o especial de la que quieren hacer partícipe a M* y cuál es el superior que la concede o cuál la circunstancia propia que la determina?
Sucede que el desempeño de M* no es el mejor, aunque la niña cuenta con una capacidades sobresalientes. Pero, la falta de un efectivo y eficaz acompañamiento y la ausencia de una relación equilibrada entre padres e hija, han ido configurando una niña irrresponsable frente al cumplimiento de sus deberes y una persona que desde ya encuentra en la mentira la mejor estrategia para cubrir sus faltas y limitaciones.
La madre, por lo manifestado a lo largo de este año, en diferentes encuentros y reuniones, es consciente de la manera como su hija se comporta y sabe de sus limitaciones y aciertos; pero se limita a cubrir los defectos que pudieran corregirse a esta temprana edad para ir haciendo de M* un ciudadano con valores de respeto, convivencia y deseos de superación, a partir de la valoración de sus habililidades y destrezas, del reconocimiento de sus dificultades y errores y del manejo de unas relaciones interpersonales respetuosas y engrandecedoras.
Privilegio? Creo más bien que será la oportunidad para refundir dentro de un número mayor de compañeros a una niña para que en medio de los movimientos de la heterogeneidad  pase desapercibida, por lo menos en cuanto a sus falencias se refiere y si es del caso y ayuda el oportunismo destaque en aquello que es virtuosa.
Tendremos noticias en el futuro.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Recreo es recreo

La semana que concluyó dejó una lección bastante sencilla pero muy edificante para quienes ejercemos como profesores.

Sucede que el martes el horario se altera un poco debido a la presencia de la profesora Dora quien orienta la clase de Informática (para el caso de los niveles Cuarto y Quinto TIC). Llegó el momento del recreo para los dos grados superiores y niños y niñas se dirigieron a la cancha para jugar micro fútbol.

Un profesor practicante de la Univversidad local, adelantaba clase con los pequeños e indispuesto ante la llegada de los estudiantes decidió suspender la clase y prohibir el juego para unos y otros.

Mis estudiantes me buscaron para referirme la situación. Les hice ver que habían cometido una faltaba al no avisar al profesor que era su hora de recreo y solicitarle autorización para disponer de la cancha y poder utilizar el balón.

Conscientes de la situación se dirigieron al profesor para entregar la correspondiente disculpa y solicitar el préstamo del balón.

El joven profesional negó el préstamo del balón.

Me vi precisado a dialogar con él y explicarle que el recreo para los niños es sagrado. Y que la acción cometida no ameritaba la suspensió de este derecho. Accedió, no muy convencido. Pero aprendió lo importante que es el recreo para estos niños y lo reponsable que se vuelve su concepció y manejo para utilizar su suspensión como castigo.
Yo también lo recorde. De hecho siempre evito y casi nunca he llegado a asumir la actitud de quitar un recreo. Porque para el niño: recreo es recreo.

Pájaros


Desde siempre nos han fascinado. Es el primer referente que nos lleva a pensar en la posibilidad de volar. De volar como símbolo de libertad. Nos han acompañado en las primeras horas del día con sus cantos fascinates. En las mañanas con sus revoloteos de rama en rama o de flor en flor. Algunos, de plumajes multicolores, se muestran esquivos ante nuestra presencia. Y eso nos atrae más de estos seres maravillosos.

Cuando deciden migrar en bandadas y se convierten en nubes galopantes en los cielos diáfanos nos dejan la nostalgia de su ausencia. ¿Adónde irán? Pregunta el niño mientras continúa de la mano de su mamá por el campo, abierto y barrido por los últimos vientos de agosto.

La mamá guarda silencio porque también desconoce la ruta de estas aves.

Las abuelas de estas montañas bautizaron como "la hora del siote" al tiempo que divide la claridad del día y la oscuridad de la noche. Porque es entonces cuando este pájaro de plumaje color hábito de fraile, emite su silbido largo y melancólico, a veces premonitorio.

Son tantas las significaciones que se pueden derivar de sus vidas que son una riqueza inagotable.

Y eso sin mencionar siquiera el porte al equilibrio de los ecosistemas.

¿Por qué los pájaros?

Porque esta semana un grupo de niños y niñas de la escuela, luego de haber hecho el seguimiento de un nido de colibrí, decidieron que ya era hora de ayudar a volar a estos iridiscentes encantos. Entonces, bajaron el nido y se llevaron a los dos pichones hasta un paraje cerca de los salones y se dedicaron a impulsar el vuelo prematuro a las criaturas. Un juego de picardía que nos llevó a una reflexión:

Si los niños de la vereda Monteadentro no son los guardianes de la riqueza ecológica de la zona, entonces, ¿quién?

Compromiso: Redactar sendas cartas dirigidas a Corponor y a la Policía Ambiental para solicitar un acompañamiento y asesoría para aprender a cuidar la naturaleza de nuestro medio.

Eso será la semana que comienza. Escribiré sobre los resultados de esta dinámica.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Reglamento de Juego.

En el encuentro de Colombia: Aula de Agua 2 de hoy jueves con el Nivel Cuarto compartimos la temática del juego y la recreación como estrategias para mantener un sistema locomotor sano.
Luego de leer las instrucciones y de sortear la composición de los dos equipos, salimos al patio de recreo para jugar a los bolos.
P* integrante de los Leones quiso iniciar el juego y ante la sugerencia de que se sortearan entre los integrantes del equipo el primer turno de juego, se disgustó y terminó marginándose del juego.
Lo reemplacé y jugué. Como uno más del equipo. Bajo el sol cercano al mediodía marcamos con tiza en un rincón del patio los bolos derribados con un balón de micro fútbol. Fue un recreo.
Al retornar al salón evaluamos la actividad. Alguien dijo:
-Hubiéramos disfrutado más si P* hubiera jugado con nosotros.
Esa opinión constataba que somos un colectivo y que por encima de los caprichos aislados nos sentimos y sabemos como equipo, alguien falla y ese alguien nos hace falta.
Terminamos el encuentro consignando un Reglamento del juego en los recreos.
El compromiso: ponerlo en práctica en cada uno de los momentos y espacios de recreación dentro y fuera de la escuela.

Voluntad.

Uno de mis estudiantes del Cuarto Nivel presenta (desde el diagnóstico inicial) la incómoda situación de confundir b/d, hasta el punto de utilizar la v por la d ( y viceversa).
P* sin embargo, consciente del problema, desde principio del año lectivo ha manifestado la voluntad de superar la dificultad.
Ha realizado los ejercicios sugeridos para corregir el error.
El logro a la fecha no es total.
Cuando toma la decisión de atender y de concentrarse la presencia de la inversión es mínima o nula. Pero en la cotidianidad persiste la dificultad.
Recientemente obsequié un cuaderno a acada niño o niña, a raíz de la pérdida del material de trabajo individual de un estudiante de Quinto Nivel.
Lo que deseo registrar es que a comienzo de semana llegó P* con este cuaderno marcado: "Para no confundir b con d" y manifestó que había empezado a hacer algunos ejercicios y transcripciones con el propósito de superar esa dificultad.
Es decir, P*, muestra la voluntad (Facultad de decidir y ordenar la propia conducta) de dedicar parte de su tiempo para terminar utilizando correctamente las letras b y d.
Valoré esta acción y lo felicité porque partió de su inciativa, además, porque es la expresión de una semilla determinanate para el progreso individual y colectivo: el deseo de superación.

martes, 8 de septiembre de 2009

El juego como posibilidad de conocimiento.

Con el Nivel Cuarto en el proyecto de Colombia: Aula de Agua 2, iniciamos hoy el desarrollo de una guía sobre el juego y la recreación como estrategias para mantener sano nuestro sistema locomotor.
Leimos las instrucciones del juego "El Rey y la Reina" y distribuidos en dos grupos, niños y niñas  salieron al corredor.
El juego comenzó y al principio los desacuerdos ante posibles ventajas de un grupo o del otro, enredaron el desarrollo del juego.
Se trataba de una competencia sencilla: buscar objetos que los líderes de cada uno de los grupos debía presentar en el menor tiempo posible al Rey.
El grupo que hiciera primero cinco puntos,  sería el ganador.
Luego se alternaron el papel del Rey, y entonces, le correspondió el turno a una Reina y se repitió la mecánica de la primera parte.
Al finalizar el juego, con un empate entre los dos grupos, terminó también la jornada académica y los estudiantes se dispusieron a almorzar.
Estaban contentos; comentaron los aciertos y lo que les hizo falta para haberse erigido en los ganadores absolutos. Con sus mejillas coloradas se sentaron a la mesa y disfrutaron del almuerzo.
En ese tiempo aprendieron, aprendimos. ¿qué?
El trabajo en equipo, la cooperación, la autoestima, la fatiga, la necesidad de descanso y recordaron algo que recientemente habían concluido: el juego y el ejercicio bien realizado, contribuyen a mantener nuestro sistema locomotor sano y saludable.

Raros ejemplares.





Alexis, del nivel cuarto, ha llegado una mañana y antes del saludo me ha invitado a ver un animalito que trae dentro de su mano derecha.
Bueno, no era propiamente un animalito, era el vestigio de un ser vivo, un insecto, posiblimente. Observarlo fue tener la posibiliad para admirar la arquitectura sabia de la naturaleza en algo más de un centímetro. 
He señalado que no era propiamente un animalito. Sucede, eso pienso, que esta estructura de suave amarillo transparente, debió albergar un insecto, parecido en su forma  a una abeja, pero un poco más grande. Ha quedado el molde y su contenido debió fugarse  hacia un nuevo estado de su metamorfosis.
-Alexis, ¿qué animal es éste, dónde lo encontró?
-No sé, profe, lo traje para que usted me diga. Lo topé allí al cruzar la cerca-  Y señaló hacia donde se insinuaba un camino amarillento en medio de los matorrales.
-No, desconozco de qué se trata.
Entonces, le recomendé que buscara a ver si encontraba otros ejemplares. Y le sugerí que observara el entorno en el cual estaban. Que fuera cuidadoso al mirar qué animales estaban cerca, posiblemente el evadido fuera una mariposa o un gusano o...
Al lunes siguiente, Alexis llegó con varios de los ejemplares entre sus manos, y los exhibió ante sus compañeros como un trofeo de una difícil caza.
Los observamos y algunos intentaron una explicación:
-Ah, eso son unas avispas que se murieron por el frío. 
-No, qué van a ser avispas, no ve que no se parecen a las que tenemos en el rincón de Ciencias.
-Yo creo que son mariposas que se fueron.
Y así se dieron las opiniones, algunas con la suficiente seriedad para convencer y otras con la picardía propia de la edad.
Al final todos quedamos comprometidos en consultar la posible naturaleza de estos animalitos o vestigios de los mismos.
Cuando haya alguna noticia al respecto, escribiré.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Infancia Feliz





Recientemente como temática dentro del proyecto Colombia: Aula de Agua, en el nivel cuarto tratamos el tema referente a instituciones que protegen los derechos de los niños y las niñas.
Hoy nos visitó un grupo de personas vinculados a Futuro Colombia, que en unión del Cuerpo Técnico de Investigación -CTI- y con el apoyo de la Gobernación de Norte de Santander, promueven la campaña "1000 Historias de Abuso Sexual ya han sido contadas... La de una infancia feliz ahora será contada.
 Se trata de una campaña de sensibilización a la población infantil a partir de la consideración de que "el abuso sexual  es más frecuente de lo que se piensa y sólo si usrted denuncia se puede evitar que las cifras aumenten".
Se explicó a los estudiantes, desde Pre escolar hasta Quinto qué es el abuso sexual, tipos de abuso sexual y se transmitieron algunas recomendaciones muy importantes para esta población.
Fue una forma de enfatizar temáticas que en nuestra escuela se han venido compartiendo con los estudiantes desde años atrás, a través del Proyecto de Educación Sexual, en la Cátedra Salud o en áreas como Ciencias Sociales, Ciencias Naturales y Educación Ética y Valores.
Además que los niños y niñas constaten de primera mano que estas instituciones efectivamente existen y dentro de sus objetivos está el de apoyar a la infancia y estar dispuestos a escuchar sus inquietudes y problemas que se le puedan presentar.  

domingo, 6 de septiembre de 2009

Las Regletas de Cuisenaire.





Las regletas Cuissenaire son un material matemático destinado básicamente a que los niños aprendan la composición y descomposición de los números e iniciarles en las actividades de cálculo, todo ello sobre una base manipulativa. El material consta de un conjunto de regletas de madera de diez tamaños y colores diferentes. La longitud de las mismas va de 1 a 10 cm. Cada regleta equivale a un número determinado:



La regleta blanca, con 1 cm. de longitud, representa al número 1.


La regleta roja, con 2 cm. representa al número 2.


La regleta verde claro, con 3 cm. representa al número 3.


La regleta rosa, con 4 cm. representa al número 4.


La regleta amarilla, con 5 cm. representa al número 5.


La regleta verde oscuro, con 6 cm. representa al número 6.


La regleta negra, con 7 cm. representa al número 7.


La regleta marrón, con 8 cm. representa al número 8.


La regleta azul, con 9 cm. representa al número 9.


La regleta naranja, con 10 cm. representa al número 10.
Luego de buscar este material en varias partes, terminé encontrando una versión realizada por estudiantes de la Normal Superior, en la biblioteca de esta institución.
Nuestra sede, que en su momento fue la Escuela Nueva Rural Cariongo, nunca las tuvo o por lo menos en la actualidad no se conservan.
Lo cierto es que en el acercamiento a este material didáctico estoy empezando a convencerme que inventos de este tipo han sido subvalorados por las comunidades educativas y por la sociedad en general. Podría pensar que semejante situación acontece con el ábaco.
Ahora que he tenido la opotunidad de saber de la existencia de las Regletas de Cuisenaire, me he propuesto consultar su origen y la manera de incorporarlas creativamente y con éxito al aula de clase.
Y he encontrado material que me permite asegurar que este  es un gran invento y el cual quiero tener muy cerca para compartirlo con mis estudiantes para acercarlos lúdicamente a los Números para la vid@.





El error como posibilidad de conocimiento.

Se ha dicho que de los errores también se aprende. Y si nos detenemos un poco a reflexionar sobre este postulado se nos hará difícil creer que este mecanismo opere sin equívocos.
En ocasiones he expresado que estoy adelantando un proyecto y que soy consciente de esta acción por los errores que decubro en el camino, es decir, yerro, por lo tanto estoy haciendo algo.
Ahora, se necesita humildad para aceptar que se cometen errores en un proceso. La altivez que a veces se acuna en nuestro ego no nos deja muchas veces compartir las dificultades o carencias y llegamos a creer que por el simple hecho de estar haciendo algo, ya tenemos la verdad en la mano, una verdad elevada a la categoría de dogma.
Estas reflexiones las traigo a este espacio como producto de escuchar a un estudiante de la Universidad de Pamplona que adelanta su proyecto de Trabajo Social en la Sede, en el área de Educación Física.
Sucedió que por estos días iniciaba el montaje de una danza con los estudiantes de los niveles segundo y tercero.
En algún momento de su práctica, la profesora titular de los mencionados cursos le observa que la música que está utilizando para la cumbia, corresponde a una guabina.
El estudiante, más que sorprendido (como correspondería a la situación), cercano a la irritación,  responde que él sabe lo que está haciendo y que esa acción está respaldada por lo que le enseñaron en la Universidad.
Lejos estuvo de aceptar el error que le señalaba la profesora. Lejos estará de perfilarse como un profesional de la educación si no comprende con humildad que de los errores se aprende. Los errores se hicieron para cometerlos, pero también para corregirlos y de esa experiencia engrandecedora sacar el mejor provecho.

viernes, 4 de septiembre de 2009

Influencia.

Hoy faltó a clase por motivo de enfermedad (por lo menos esa razón llegó a través de la abuela de la niña) M*.
Durante los últimos días he observado la promoción de desorden y de indisciplina por parte de esta estudiante del nivel cuarto.
Son muchas las situaciones que comprometen a esta niña, hiperactiva, con la interrupción constante de la acvtividad académica o la desatención y falta de concentración, no sólo de ella sino del resto del grupo.
Sin embargo, durante las tres horas de encuentro de Números para la vid@, la atmósfera de trabajo hoy fue diferente.
Los niños y las niñas estaban atentos y concentrados en los juegos desarrollados con las Regletas de Cuisenaire, y reproducían en gráficos los arreglos  formados, cuyo objetivo es la composición y descomposición de los números, al tiempo que iniciarlos en las actividades de cálculo.
Hubo participación, trabajo ordenado y disciplinado y niños que en otras ocasiones aparecían pasivos y poco participativos, intervinieron con respuestas acertadas.
Para observar con detenimiento: Influencia de M* en el bajo rendimiento del nivel cuarto.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Hábitos.

Definido como "modo especial de proceder o conducirse adquirido por repetición de actos iguales o semejantes, u originado por tendencias instintivas", el hábito es una manera que expresa un conjunto de conocimientos y de maneras de interactuar, bien o mal; de ahí que se hable de buenos o malos hábitos.
He observado en mis estudiantes algunas actuaciones que por lo repetitivo pudiera denominarlas como hábitos, pero que lamentablemente para el caso que me ocupa, no son las mejores.
Así, por ejemplo, la forma de sentarse en el comedor o en el aula de clase, la manera de saludar o responder a un saludo, observación o requerimiento, y cada uno de los aparentemente insignificantes actos cotidianos: la presentación de una solicitud o reclamo, la manifestación de incomodidad ante algo o alguien, la acción posterior al recibir algo, y podría seguir enunciando acciones diarias.
Una de las conclusiones a las que se pudiera llegar es que en los hogares el buen  ejemplo escacea y por el contrario las muestras que contradicen los buenos hábitos se hacen frecuentes y cotidianas. 
Así, no es extremo decir que lo que hace la escuela se desdibuja en los hogares. 
Tarea: Comprometer a los padres y demás familiares con el asumir actitudes que deriven en buenos modales y hábitos de convivencia pacífica.  

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Versos en medio del estío

Cercano el equinoccio de otoño en esta región tropical, de montañas azulecidas, guarecidas en las tardes por las nubes caprichosas y oscuras, la actividad sigue... continúa con sus altibajos, apenas naturales.
Mis estudiantes están escribiendo fábulas, poesías y ensayos. Algunas pruebas mías  como muestras quedaron en el tablero blanco y brillante del aula. Renuncié voluntariamente a quedarme con copia de esos experimentos. Ah, tal vez con la excepción de una estrofa.
Hoy estuve en la emisora 94.9 Radio Universidad de Pamplona. Allí un antiguo discípulo de medios es el encargado de la producción y de alguna manera le ha dado identidad a este espacio tan necesario para la Ciudad de la Neblina.
Llevé los dos temas compuestos hace tres años y grabados el anterior. Es compartir con los oyentes estas obras y sentir que es posible la difusión de ideas necias.
También buscaba algunos temas para montar con mis estudiantes dos o tres canciones del folclor colombiano.
Y de pronto llegó a los estudios una de las jóvenes productoras de la emisora quien requería al amigo para que procedieran a grabar algunos textos para ambientar la programación de este mes de amor y amistad.
Le ofrecí un poema de mi autoría y al buscar en mis textos podría decir que es más desamor que amor el que he encontrado. Entonces, arriesgué este ejercicio:

Me hablas en el lenguaje de la mañana
y en cada sílaba de luz percibo el pálpito
que desde su secreto me anuncia primavera.

…Vendrán las flores con su encendido sentimiento para este refugiado del invierno.

Serás entonces mi estación y la sustancia de mi sueño.

martes, 1 de septiembre de 2009

Es posible.

Faltando apenas un acudiente y con la presencia de los restantes y los estudiantes nos reunimos a primera hora del día, aspirando encontrar alguna respuesta al extravío del cuaderno de Red de Escritores de Claudia.
Hice de manera rápida una presentación del caso, antecediendo ésto con una referencia al comportamiento del niño Johan Esteven Martínez, de once años e hijo de uno de los militares secuestrados hace más de diez años.
En todas las apariciones a través de los medios, el pequeño,  sobreponiéndose al dolor que debe significar la circunstancia traumática que vive desde su nacimiento, ha expresado sentimientos nobles y deseos de superación, al tiempo que le ha dado fortaleza a su padre en el cautiverio a través de mensajes diseñados desde la madurez aprendida en las condiciones difíciles, cercanas a la tragedia, pero ha mostrado su valor ante la opinión nacional e internacional al asumir acciones como la caminata recientemente emprendida para pedir la liberación de su padre.
Johan ha continuado estudiando; percibo que mezcla las actividades propias de la academia con las que debió asumir sin estar preparado ni maduro para buscar en medio de una jungla de inhumanidad a su padre.
¿A qué viene la historia de este niño nariñense? Fácil: mis estudiantes, aunque viven situaciones difíciles, nunca podrían compararlas con las que convive este colombiano, ejemplo de templanza, autoestima y amor.
Entonces, ¿qué está sucediendo al interior de los hogares de Monteadentro? ¿Por qué los niños y niñas, por lo menos los que cursan cuarto o quinto nivel, presentan actuaciones que hablan de deslealtad, deshonestidad, mentira, baja autoestima, falta de compañerismo y bastante agresividad consigo mismo y con los demás?
Desde ese marco se dialogó sobre el tema que convocó. Expresaron sus ideas los estudiantes, los padres de familia y al final del encuentro quedó la vaga sensación que el incidente hubiera formado parte de un sueño.
Repartí cuadernos e invité a niños, niñas y padres de familia a sensibilizarnos frente a asumir verdades por incómodas que llegaran a resultar.
Sólo así, estaremos contribuyendo a formar ciudadanos de bien. Por lo menos es mi creeencia y convicción.

lunes, 31 de agosto de 2009

El cuaderno no está.

Luego de un receso de cuatro días debido: Asamblea del Magisterio, participación en el I Festival de la Danza Folclórica Campesina y el fin de semana, este lunes, último de agosto un estudiante de Quinto Nivel me dijo:
-Mi cuaderno de Red de Escritores no está-
Efectivamente el cuaderno había sido observado el miércoles y junto a dos más quedó sobre el escritorio del maestro para que sus dueños los retiraran luego del encuentro de Jugueteatrando.
Resumiendo la historia, se dialogó con los estudiantes, se les permitió dialogar a ellos, sin acompñamiento del maestro, y al final de la mañana, antes de pasar al almuerzo, la niña de quinto, reiteró, con preocupación y tristeza:
-Profe, mi cuaderno no está.
Conclusión: el cuaderno se extravió entre las manos de los niños y niñas de los niveles cuarto y quinto.
Ha resultado difícil encontrar sinceridad en la mayoría de ellos. No están acostumbrados a decir la verdad.
Algo pasó. Es una muestra de que en los hogares las cosas no funcionan como lo diseñamos en la escuela, los valores se están desvaneciendo, y en este compromiso la escuela está quedando sola. Lo que se hace en la escuela se pierde en la casa.
Mañana vendrán los padres de familia.
Alguien dijo:
-Amanecerá y veremos.

Educación en la primera infancia

Resultó bastante curioso encontrarme con una nota publicada en el periódico El Tiempo del domingo 30 de agosto, escrita por el Luis Alberto Moreno, Presidente del BID.
En el escrito el colombiano hace un repaso sobre la necesidad que tienen países como los latinoamericanos de que sus administraciones inviertan responsablemente en la educación de sus niños y niñas, preferiblemente antes o hasta los tres años, porque sería la forma más segura de garantizar un nivel de desarrollo para que cuando estos infantes lleguen a la escuela estén en capacidad de iniciar su proceso de aprendizaje.
Resalta Moreno que es en los tres primeros años que el cerecbro se configura en el ser humano o por lo menos la mayoría de sus potencialidades y funciones y que de no atender a esta urgente y básica necesidad los niños de mañana tendrán notables dificultades al llegar a la escuela, sobrevivir en ella y transitar por el Bachillerato y posteriormente en la educación superior.
Seguramente, esto no es desconocido para la mayoría de personas que han tenido la oportunidad de culminar la educación media y menos para una persona que como el ilustre colombiano ocupó altos cargos en administraciones de nuestro país y ahora se desvela detrás de la presidencia del BID.
Lo curioso, o por lo menos para mí, es que  si se revisara la historia y sus estadísticas en las actuaciones de personajes como Moreno, se llegaría fácilmente a la conclusión que desde sus altos cargos hicieron todo lo contrario a lo que muestran en sus acicaladas columnas de seudocomentaristas.
Es más, ¿qué está haciendo por Latinoamérica este personaje?

Piel sobre piel.

Hace muchos años, cuando estudiaba en una vereda del municipio de Herrán, cursando el primero elemental, era frecuente ver a los campesinos que en épocas de lluvia cubrían su espalda con una porción de plástico, generalmente de colores, para protegerse de la humedad mientras adelantaban su labor de agricultura.
Por estos días observé que uno de los campesinos de Monteadentro, ante la inminencia de una jornada lluviosa llevaba acomodada en su espalda una piel de cabro o venado pequeño que por estas tierras se conoce con el nombre de locho. posiblemente es el trofeo que guarda de una caza exitosa, en el caso de tratarse de la piel del segundo animal o un recuerdo de familia, si fuera el primero.
Buscaba protegerse de la lluvia bajo la cual trabajaría aquel dìa, colgando arveja o ayudando como auxiliar del aserrador de madera.

domingo, 30 de agosto de 2009

Festival de la Danza Folclórica Campesina


La Sede Escolar El Naranjo realizó el viernes 28 de agosto el I Festival de la Danza Folclórica Campesina.

Uno de los objetivos propuestos por la organización fue rescatar los valores culturales que encierran cada una de estas danzas, al mismo tiempo estrechar los lazos de amistad y fraternidad entre las comunidades escolares.

Los criterios que se tuvieron en cuenta fueron:

Danza netamente colombiana.

Mínimo cuatro parejas.

Riqueza coreográfica.

Descripción y reseña de la danza.

Vestuario acorde a la danza.

Originalidad e innovación en la presentación de la danza.

El grupo Danzas de Monteadentro fue invitado y presentó el baile en que se venía trabajando durante los últimos encuentros: Polka Nortesantandereana.

Fue una experiencia enriquecedora: los niños y niñas de los niveles cuarto y quinto se motivaron con la posibilidad de compartir el proyecto de danzas que se adelanta. Además, la oportunidad de conocer otras personas y poder observar los diferentes bailes, formaron parte de un día de actividad académica fuera de las cuatro paredes.

Interactuar con otros niños y niñas, campesinos también contribuye a su formación integral. El recorrido, aunque corto, siempre se vuelve escenario de conocimiento: la vegetación la fauna, en general el paisaje.

Regresamos sobre el mediodía, cada uno de ellos traía un botón recuerdo del certamen y a la Sede se le entregó un CD con los himnos y música folclórica colombiana.

“Esta vez” dijo una de las profesoras organizadoras, “quisimos reemplazar el tradicional diploma por este material que esperamos sirva en sus comunidades para difundir nuestros valores”.